Los aceites curativos que aparecen en la Biblia son todos esenciales o aromáticos (AE). Son los fluidos, la sangre, elemento vital de la planta. Son esenciales porque llevan la esencia de la planta. Los pueblos en los tiempos de la Biblia, inhalaban los aceites esenciales, los aplicaban y los ingerían, y estos iban a sanar todos los cuerpos de la persona. Así su ser físico, mental, emocional y espiritual mejoraba notablemente con estos aceites esenciales. Desde mantener el bienestar hasta realizar curaciones físicas, mejorar el estado espiritual al rendir culto, limpiarse emocionalmente y “purificarse de los pecados”.
No es de sorprender que los aceites aromáticos hayan sido atesorados y parte cotidiana de la vida de quienes habitaron la Tierra Santa durante los tiempos de la Biblia.
La franja territorial entre el Mar Mediterráneo y el Río Jordán era encrucijada para el comercio de especias, aceites y hierbas aromáticas provenientes de todas partes del mundo conocido en aquel entonces. Debido a su ubicación estratégica para el comercio internacional de la época los pueblos de la Biblia tenían acceso a la mayor variedad de AE, hierbas medicinales perfumes y ungüentos que quizás cualquier otra nación. Pueblos como Arabia, Líbano, Persia, Babilonia, y el sudeste de Europa, Egipto, Libia y otras partes de África, así como la India, los Himalayas e incluso China tenían acceso a toda esta magnificencia del comercio de las especias y AE. [Read more…]